En un contexto donde Google avanza hacia búsquedas cada vez más impulsadas por la inteligencia artificial, muchas empresas —especialmente autónomos y pequeños negocios— se preguntan qué deberán cambiar para seguir siendo visibles en 2026. Para resolver estas dudas, hablamos con Javier Callejo, consultor SEO y diseñador web, quien analiza cómo esta transformación afectará al posicionamiento y qué pasos deben dar las empresas para adaptarse a tiempo.
Entrevista a Javier Callejo, consultor SEO y diseñador web
— Javier, ¿qué cambios notaremos realmente cuando Google meta más IA en las búsquedas en 2026?
Pues mira, te lo digo claro: las empresas pequeñas lo van a notar sí o sí. Hasta ahora había margen para “pelear” con estructura, con textos y con posicionamiento SEO. Pero la IA va a filtrar mucho más. Si una web no aporta valor real, si no explica bien lo que hace o si está mal hecha, directamente va a dejar de aparecer.
Google está empezando a responder él mismo muchas búsquedas, pero al mismo tiempo está premiando muchísimo más el contenido útil y la experiencia real. Y eso solo se puede mostrar con vídeos. Antes podían ser opcionales para las empresas, pero ahora se han convertido prácticamente en una obligación.
— ¿Qué recomiendas que hagan las empresas antes de 2026?
Revisar su web y su comunicación desde cero. Pero de verdad. No desde el “me gusta el diseño”, sino desde una pregunta mucho más simple: ¿mi web está respondiendo algo útil?, ¿mis redes están comunicando de verdad?
Muchas webs no responden a nada. Hablan de la empresa, de lo buenos que son, pero no resuelven dudas, se nota que no hay detrás una buena empresa de posicionamiento web. Y eso es justo lo que la IA detecta: si ayudas o no ayudas. También es importante tener una buena arquitectura. Parece una tontería, pero Google necesita entender tu web en segundos. Si es un lío, la descarta aunque tenga buen contenido. Y en redes pasa igual: o aportas claridad o desapareces entre el ruido.
— ¿Cómo afecta esto a negocios locales —carpinterías, talleres, clínicas— que viven del día a día?
Ellos pueden ser los más perjudicados o los más beneficiados, porque son quienes más contenido útil pueden aportar. Si un psicólogo explica con calma un problema común, si un técnico enseña una avería, si un carpintero muestra cómo ajusta algo —aunque sea con un vídeo grabado con el móvil— la gente lo valora y Google también.
Además, el público adulto está entrando a lo bestia en YouTube, Instagram y Facebook. Y ese público se queda viendo contenido real durante horas, no lo superproducido. Para autónomos y PYMES, este “nuevo SEO social” puede ser una oportunidad enorme.
— ¿Tu recomendación final para un autónomo que quiera seguir siendo visible el próximo año?
Que se quite el miedo y, si su agencia se lo recomienda, empiece a grabar vídeos. Cuando un profesional se muestra, nuestro trabajo se vuelve el doble de eficaz. Porque ya no estamos inventando contenido: estamos amplificando algo real.
No necesitas ser influencer ni tener 20 años. Necesitas ser claro, natural y directo. La gente quiere sentir que quien habla sabe de lo que habla y busca negocios en los que pueda confiar. Y Google también. Quien entienda esto ahora, en 2026 va a estar por delante.
El próximo año va a ser clave para definir el marketing y el posicionamiento de aquí a los próximos años
